lunes, 27 de octubre de 2014

Mi primera experiencia en la hipnosis


Hará un par de días, mis amigos me llevaron a una actuación de hipnosis y mentalismo, yo estaba un poco confuso,  no sabía realmente lo que me iba a encontrar, pero tenía claro que fuera lo que fuera sería mentira, ya que siempre he sido un poco escéptico para esos temas.

El "mago", empezó con los trucos típicos de cartas, como los que nos encontramos en cualquier  programa televisivo, aunque debo de admitir que en persona lo percibía de otra manera y aunque te lo haga como se suele decir en la cara, el mago tenía tanta habilidad que era imposible  acertar el truco, lo que daba mucha frustración. Nos mostró algunos trucos, como el típico de romper una carta y luego volver a juntar la carta, o meter una determinada carta en mitad de la baraja y hacer que la carta subiera a hasta alcanzar su boca.

Luego empezó a utilizar trucos de mentalismo, lo que me gustó mucho de la actuación es que el mago explicaba los métodos, que empleaba y nos dejaba ver que todos podemos llegar a utilizar estas técnicas, basadas  en el poder de la observación. De la observación y de llevar al público hacia donde al actor le interesa. Pero esto no es un poder, es simplemente práctica y estudio. Estudio que se basa en el lenguaje no verbal, y que  te aporta la  información de la otra persona: no le estás leyendo la mente sino que le estás leyendo el cuerpo, la mirada, el gesto, el movimiento…

Esto se observa  muy bien en una serie que me gusta mucho y que se llama  El Mentalista , al protagonista lo acusan de estafador, en realidad, (Patrick Jane), no lo es en absoluto; porque no se trata de magia ni de poderes esotéricos, sino de algo tan simple como la observación. Puede ser utilizado para sorprender, asustar, entretener e incluso manipular.

La última parte de la actuación  estuvo enfocada a  la hipnosis, para los que no lo sepan, esta ciencia o técnica, según se mire, no es un estado en el que el sujeto pierde el conocimiento, sino que la persona entra en un estado de somnolencia, es un estado agradable durante el cual quedan en suspenso las dudas y los temores.

El “mago” eligió  a varios voluntarios , entre ellos mis amigos, y les hicieron entrar en trance hipnótico, en un momento determinado  solo respondían a la voz del “mago”, por ejemplo ,a una chica le atravesó el brazo con una gran aguja y le convenció de que no le dolería y que luego, cuando despertase, no podría pararse de reírse. La siguiente víctima fue mi amiga, a la cual le inculcó  que tenía mucha sed, a lo que le dio un vaso de agua que estaba vació y ella empezó a beber del vaso, aunque realmente no había nada, a continuación, le empezó a decir que cuando despertara se tendría que ir al servicio, debido al agua que había bebido, y así fue. Estas personas estaban como dormidas pero totalmente conscientes.

Sin duda una gran experiencia, que deja asombrado a cualquiera. Si tenéis la oportunidad de ir a una actuación de este tipo, no lo dudéis.


ElTitoPalmer


1 comentario:

  1. A mí me gustan mucho la magia y los magos. Reconozco que algunos de los trucos realizados por Dynamo me dejan de piedra. El hipnotismo me resulta inquietante. Me siento más incómoda con ello.

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